La celebración de hoy
San Norberto, Arzobispo de Magdeburgo: Fundador y Confesor
Coronilla a la Misericordia
Reza ahora la
Coronilla
Jesús en ti Confío
Coronilla a la Divina Misericordia de Hoy Viernes y Consagración
Lecturas del día
Maria, hoy, vemos que Jesús, en un momento de ternura y verdad, toma aparte a Pedro para una conversación que marcará para siempre el rumbo de su vida.
Presta atención a las lecturas de hoy.
Primera lectura: Hechos 25,13b-21.
En aquellos días, el rey Agripa y Berenice llegaron a Cesarea y fueron a saludar a Festo. Como ellos permanecieron varios días, Festo expuso al rey el caso de Pablo, diciéndole: «Félix ha dejado a un prisionero, y durante mi estadía en Jerusalén, los sumos sacerdotes y los ancianos de los judíos, presentaron quejas pidiendo su condena. Yo les respondí que los romanos no tienen la costumbre de entregar a un hombre antes de enfrentarlo con sus acusadores y darle la oportunidad de defenderse. Ellos vinieron aquí, y sin ninguna demora, me senté en el tribunal e hice comparecer a ese hombre al día siguiente. Pero cuando se presentaron los acusadores, estos no alegaron contra él ninguno de los cargos que yo sospechaba. Lo que había entre ellos eran no sé qué discusiones sobre su religión, y sobre un tal Jesús que murió, y que Pablo asegura que vive. No sabiendo bien qué partido tomar en un asunto de esta índole, le pregunté a Pablo si quería ir a Jerusalén para ser juzgado allí. Pero como este apeló al juicio de Su Majestad imperial, yo ordené que lo dejaran bajo custodia hasta que lo enviara al Cesar». Palabra de Dios.
Salmo 103(102): El Señor ha establecido su trono en el cielo. (R)
Bendice, alma mía, al Señor, y bendice todo mi ser su santo nombre. Bendice al Señor, alma mía, y no olvides todos sus beneficios. /R.
Porque como los cielos son altos sobre la tierra, así es de grande su misericordia para con los que le temen. Como está de lejos el oriente del occidente, así ha alejado de nosotros nuestras rebeliones. /R.
El Señor ha establecido su trono en los cielos, y su reino lo domina todo. Bendigan al Señor todos sus ángeles, los poderosos que cumplís sus órdenes. /R.
Evangelio: Juan 21,15-19.
En aquellos días, Jesús se les apareció a sus discípulos, y después de comer, Jesús dijo a Simón Pedro: «Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que estos?». Él le respondió: «Sí, Señor, tú sabes que te quiero». Jesús le dijo: «Apacienta mis corderos». Le volvió a decir por segunda vez: «Simón, hijo de Juan, ¿me amas?». Él le respondió: «Sí, Señor, sabes que te quiero». Jesús le dijo: «Apacienta mis ovejas». Le preguntó por tercera vez: «Simón, hijo de Juan, ¿me quieres?». Pedro se entristeció de que por tercera vez le preguntara si lo quería, y le dijo: «Señor, tú lo sabes todo; sabes que te quiero». Jesús le dijo: «Apacienta mis ovejas. Te aseguro que cuando eras joven, tú mismo te vestías e ibas a donde querías. Pero cuando seas viejo, extenderás tus brazos, y otro te atará y te llevará a donde no quieras». De esta manera, indicaba con qué muerte Pedro debía glorificar a Dios. Y después de hablar así, le dijo: «Sígueme». Palabra del Señor.